Con profundo dolor Indoamericano sentimos profundamente la partida del maestro Aníbal Quijano, y un gran abrazo de agradecimiento al pueblo Peruano.
viernes, 1 de junio de 2018
viernes, 1 de diciembre de 2017
Derechos y obligaciones
Derechos y obligaciones
Los derechos y las
obligaciones deberían tener el mismo peso ante la ley como ante la justicia
popular; sin embargo ésta hace prevalecer los derechos por sobre las
obligaciones; esto generalmente obedece al desconocimiento de las causas,
ocasionalmente principistas, que generan, respaldan o certifican, estas
cuestiones.
Esta circunstancia tan
ligera o mediática se ha puesto en evidencia estos últimos años debido a estas
nuevas herramientas de la informática que permiten exponer o viralizar, como se
usa ahora, un tema puntual en las redes
sociales, y hacerlo con pasmosa rapidez.
Rapidez,
que la mayoría de las veces, atenta con la seriedad, veracidad, con que se
trata la cuestión; ya que la ligereza de exponer una opinión ante un grupo
determinado, atenta contra el análisis profundo del tema.
Este
tratamiento de la información la podemos observar y estudiar detenidamente en
los días que siguieron al caso del ARA. San Juan y el asesinato de un joven
militante de los reclamos mapuche, por parte de las fuerzas estatales de
seguridad.
Ya lo
expresé en otras notas, este es el resultado de la falta de información veraz
por parte de los organismos responsables, en cada caso; esta desinformación
premeditada alimenta la capacidad social de crear sus propias respuestas que se
reproducen en todo aquel canal de comunicación disponible.
No
deberíamos prestarnos al juego perverso de manipulación que este mecanismo
genera, poniendo en marcha el uso que otros intereses pretenden instalar en
nuestra sociedad.
Usar
estas nuevas herramientas, no nos debe hacer perder la perspectiva, la
ecuanimidad y el análisis de lo tratado y proceder al correcto enfoque del
entorno.
Si
una cuestión y su tratamiento, es tan veloz y efímera que no nos otorga tiempo
para profundizar en sus bases o fundamentos; ésta no merece nuestra
preocupación.
Por el
contrario las circunstancias históricas que debieron vivir los pueblos del
continente y como consecuencia sus herederos, que paradójicamente somos todos
nosotros; hace que este tema se convierta, no sólo en una cuestión de
actualidad, sino una cuestión estratégica para los países involucrados.
Así lo
hice saber en “La Cuestión Mapuche” y en la infinita cantidad de notas que este
tema me movilizo a confeccionar desde la década de los ochenta.
Esta
cuestión adquiere importancia estratégica para Argentina por una razón muy
importante, al margen de la cuestión indígena, que contempla y establece sus
derechos ancestrales en pugna con los estados Nación .
Después de la guerra de Malvinas se sumaron los
intereses espurios que hay detrás de los Mapuche y de toda causa conveniente
para los británicos o las políticas al respecto de nuestro vecino país, Chile.
Lamentablemente
debemos reconocer que aquel discurso de la Hermandad Sudamericana tiene tantas
grietas como países la componen; Chile se halla enemistado con Bolivia y Perú,
con quien se enfrentó en un conflicto bélico, conocido como la guerra del
pacífico, Bolivia tiene con Chile el litigio por las fuentes de aguas
territoriales y la salida al mar que el país, hoy mediterráneo está reclamando
esa conexión con el Pacífico que antaño poseía.
Perú se
encuentra enemistado desde siempre con Chile, como dije, y con Ecuador;
mientras Colombia y Venezuela tienen dificultades para convivir en armonía
debido a lo caliente por conflictivas y peligrosas de sus fronteras internas.
Mientras
el gigante Sudamericano Brasil, hace sus propias políticas sin ocuparse por sus
vecinos, sabedor de su poder en el hemisferio.
Las
fluctuaciones políticas, impulsadas desde el norte a través de los infinitos
recursos de que dispone para controlar el hemisferio; no permiten que proyectos
como la Revolución Bolivariana impulsada por el Fallecido Hugo Chaves Frías,
prospere.
La
disolución del proyecto unificador de la UNASUR y el MERCOSUR, unos por muerte,
tal el caso de Néstor Kirchner, como por cuestiones de mandatos políticos, como
José Mujica, de Uruguay; Rafael Correa de Ecuador; Lula da Silva de Brasil;
dieron vía libre a los nuevos aires políticos en el hemisferio.
La
presencia neoliberal en nuestra región es el caldo de cultivo de todos los
males que últimamente comenzaron a gestarse.
La
cuestión planteada por las luchas y reclamos del pueblo Mapuche existen desde
que ellos presentaron batalla a quienes querían someterlos; pueblo que nunca fue oficialmente derrotado o
sometido por el usurpador de sus territorios; fueron empujados arrinconados en
las regiones del sur de ese país.
Si bien
el problema de la tierra siempre existió como una de las cuestiones más
importantes a tener en cuenta a la hora de las negociaciones en la cuestión
indígena de los pueblos aborígenes, mereciendo distintas formas o metodologías
a la hora de reclamar a los Estados Nacionales aportar soluciones; sin embargo
nunca se había llegado a tal virulencia en las acciones de protesta y reclamos.
Acciones
que no son bien vistas, por algunos residentes mapuche, que así lo hicieron
saber a la prensa.
Dichos
reclamos indígenas hoy, son funcionales a los intereses británicos en la
región, razón por la cual reflotaron las alocadas y destempladas apetencias de
un abogado francés, Orellie Antoine de Tounens
que en 1860 convenció a algunos mapuche de crear el Reino de Araucanía y Patagonia
con él como Rey litigaría y llevaría sus reclamos al concierto internacional.
Cuestión
que nunca ocurrió formalmente pero le sirvió a este personaje lograr ingresar
al complejo mundo nobiliario europeo, tan esquivo como anhelado por la burguesía
francesa del siglo XIX.
Reflotar
estas circunstancias, curiosas, llamativas necesariamente deben concatenarce
con la creación en el puerto de Bristol en 1978 una organización compuesta por
miembros mayoritariamente ingleses y un mapuche que se dedicaría
fundamentalmente a recaudar fondos para continuar la lucha del pueblo mapuche.
De esta
organización surge Facundo Jones Huala como vocero mediático de las acciones
que se emprenderían; lejos de ser un terrorista es un funcional activista a los
intereses ingleses y chilenos en la región.
Usted se
preguntará como puede ser funcional a los intereses chilenos e ingleses, y a su
vez a los intereses mapuche.
Muy
simple, llevando el conflicto sobre la tierra al Este de la cordillera.
Chile no reconoce la
Preexistencia de los pueblos aborígenes en su territorio.
Por ésta simple razón,
el “Derecho
Ancestral” válido y esgrimido por los pueblos originarios no puede
llegar a tener validez en ese país pero sí en el nuestro que les reconoce, a
los aborígenes, de su territorio, su preexistencia.
Es por
esta circunstancia que Argentina debe asegurar fehacientemente la preexistencia
de sus grupos aborígenes y no puede aceptar a todos aquellos que se digan
aborígenes Argentinos preexistentes; o que presionen para ser reconocidos como
tales.
Orélie Antoine de
Tounens
jueves, 30 de noviembre de 2017
Cuidado !!
Reconocer la razón y el derecho, no
nos hace ciegos
No confundir, o dejarse engañar
La mediática y tan mencionada RAM,
no es ninguna “Comunidad mapuche”, es una organización
administrativamente Londinence; creada por supuestos seguidores o simpatizantes
de la causa Mapuche y los litigios territoriales que estos tienen con los
estados del Cono Sur.
Su líder operativo y portavoz mediático es Facundo
Jones Huala un jóven de 31 años que en enero próximo pasado fue encarcelado en
Chubut, después de protagonizar una supuesta toma de tierras de Benetton.
“… El que roba a un ladrón tendrá cien
años de perdón”, habrá pensado la justicia ya que en esa oportunidad, no solo
lo dejaron en libertad sino que no aceptaron el pedido de extradición del
gobierno Chileno por actos de terrorismo en ese país.
Ya sabemos … “ Si ladran Sancho … Señal que
cabalgamos”, la justicia Argentina actuó a conciencia; casi siempre que un
Estado descubre, un supuesto terrorista sucede que algún interés económico o
político les está siendo vulnerando y la causa del reclamo ancestral
territorial en ese país es genuina y sólo podrá ser acallada restituyendo o
resarciendo económicamente de común acuerdo, como lo izo EEUU.
Esto que acabo de expresar no habilita a ningún
supuesto representante mapuche a tomar la justicia por su propia mano; ese
sentimiento surge de la declaración de los propios pobladores mapuche del
Maiten al diario La Nación después de los acontecimientos de las pasadas
jornadas protagonizadas por la RAM.( ver a continuación)
En esa oportunidad ( Enero “2017 ) la
Cancillería Argentina, contrariamente a lo realizado, había aconsejado acceder
a ese pedido del gobierno trasandino advirtiendo que dejar a Huala en nuestro
país crearía nuevos conflictos; cuestión que ocurrió en estos días.
Yo mismo por aquellas fechas cursé informes a la
AIRA y entidades indígenas intermedias, y a integrantes del pueblo mapuche
tratando de informarlas sobre lo que estaba sucediendo y cuál sería el peligro
al dejarse llevar el instinto de lucha y razón.
Facundo Jones Huala actúa como un mercenario al
servicio de una causa que lo lleva a utilizar la lucha ancestral del pueblo
mapuche trasandino que las huestes conquistadoras no pudieron doblegar y se
contentaron con arrinconar en la 8ª y 9ª región de Chile.
Esta causa justa de reclamo ancestral en su
territorio, Chile es de sumo interés de quienes apetecen tener más injerencia
en el Cono Sur, me estoy refiriendo a Inglaterra, que en su desmedido
colonialismo, hoy en el siglo XXI, pretende hacer que el problema mapuche
abarque también Argentina dado que se supone que estas tierras les pertenecían.
Sobre la razón de que un reclamo de
propiedad ancestral no prospere en nuestro país obedece como ya expresé a que
el pueblo que hoy ha aceptado llamarse mapuche, (Futatraum o Congreso de San
Martín de los Andes 1961 ) es de origen Chileno; solo comenzaron a
radicarce en nuestro territorio usurpando tierras Tehuelches durante el
transcurso de la primer mitad del siglo XIX mucho después que nuestro país se
independizara de España.
Esta es la razón primordial y fundamental por la
cual el “Derecho Ancestral” no es válido para los Mapuche, cuyos integrantes
radicados en Argentina deberán recurrir al código civil que contempla el
derecho de posesión territorial treintañal para todos aquellos que demuestren
haber permanecido por más de treinta años en una parcela y se reconozcan
ciudadanos Argentinos.
Derechos y obligaciones
Los derechos y las
obligaciones deberían tener el mismo peso ante la ley como ante la justicia
popular; sin embargo ésta hace prevalecer los derechos por sobre las
obligaciones; esto generalmente obedece al desconocimiento de las causas,
ocasionalmente principistas, que generan, respaldan o certifican, estas
cuestiones.
Esta circunstancia tan
ligera o mediática se ha puesto en evidencia estos últimos años debido a estas
nuevas herramientas de la informática que permiten exponer o viralizar, como se
usa ahora, un tema puntual en las redes
sociales, y hacerlo con pasmosa rapidez.
Rapidez,
que la mayoría de las veces, atenta con la seriedad, veracidad, con que se
trata la cuestión; ya que la ligereza de exponer una opinión ante un grupo
determinado, atenta contra el análisis profundo del tema.
Este
tratamiento de la información la podemos observar y estudiar detenidamente en
los días que siguieron al caso del ARA. San Juan y el asesinato de un joven
militante de los reclamos mapuche, por parte de las fuerzas estatales de
seguridad.
Ya lo
expresé en otras notas, este es el resultado de la falta de información veraz
por parte de los organismos responsables, en cada caso; esta desinformación
premeditada alimenta la capacidad social de crear sus propias respuestas que se
reproducen en todo aquel canal de comunicación disponible.
No
deberíamos prestarnos al juego perverso de manipulación que este mecanismo
genera, poniendo en marcha el uso que otros intereses pretenden instalar en
nuestra sociedad.
Usar
estas nuevas herramientas, no nos debe hacer perder la perspectiva, la
ecuanimidad y el análisis de lo tratado y proceder al correcto enfoque del
entorno.
Si
una cuestión y su tratamiento, es tan veloz y efímera que no nos otorga tiempo
para profundizar en sus bases o fundamentos; ésta no merece nuestra
preocupación.
Por el
contrario las circunstancias históricas que debieron vivir los pueblos del
continente y como consecuencia sus herederos, que paradójicamente somos todos
nosotros; hace que este tema se convierta, no sólo en una cuestión de
actualidad, sino una cuestión estratégica para los países involucrados.
Así lo
hice saber en “La Cuestión Mapuche” y en la infinita cantidad de notas que este
tema me movilizo a confeccionar desde la década de los ochenta.
Esta
cuestión adquiere importancia estratégica para Argentina por una razón muy
importante, al margen de la cuestión indígena, que contempla y establece sus
derechos ancestrales en pugna con los estados Nación .
Después de la guerra de Malvinas se sumaron los
intereses espurios que hay detrás de los Mapuche y de toda causa conveniente
para los británicos o las políticas al respecto de nuestro vecino país, Chile.
Lamentablemente
debemos reconocer que aquel discurso de la Hermandad Sudamericana tiene tantas
grietas como países la componen; Chile se halla enemistado con Bolivia y Perú,
con quien se enfrentó en un conflicto bélico, conocido como la guerra del
pacífico, Bolivia tiene con Chile el litigio por las fuentes de aguas
territoriales y la salida al mar que el país, hoy mediterráneo está reclamando
esa conexión con el Pacífico que antaño poseía.
Perú se
encuentra enemistado desde siempre con Chile, como dije, y con Ecuador;
mientras Colombia y Venezuela tienen dificultades para convivir en armonía
debido a lo caliente por conflictivas y peligrosas de sus fronteras internas.
Mientras
el gigante Sudamericano Brasil, hace sus propias políticas sin ocuparse por sus
vecinos, sabedor de su poder en el hemisferio.
Las
fluctuaciones políticas, impulsadas desde el norte a través de los infinitos
recursos de que dispone para controlar el hemisferio; no permiten que proyectos
como la Revolución Bolivariana impulsada por el Fallecido Hugo Chaves Frías,
prospere.
La
disolución del proyecto unificador de la UNASUR y el MERCOSUR, unos por muerte,
tal el caso de Néstor Kirchner, como por cuestiones de mandatos políticos, como
José Mujica, de Uruguay; Rafael Correa de Ecuador; Lula da Silva de Brasil;
dieron vía libre a los nuevos aires políticos en el hemisferio.
La
presencia neoliberal en nuestra región es el caldo de cultivo de todos los
males que últimamente comenzaron a gestarse.
La
cuestión planteada por las luchas y reclamos del pueblo Mapuche existen desde
que ellos presentaron batalla a quienes querían someterlos; pueblo que nunca fue oficialmente derrotado o
sometido por el usurpador de sus territorios; fueron empujados arrinconados en
las regiones del sur de ese país.
Si bien
el problema de la tierra siempre existió como una de las cuestiones más
importantes a tener en cuenta a la hora de las negociaciones en la cuestión
indígena de los pueblos aborígenes, mereciendo distintas formas o metodologías
a la hora de reclamar a los Estados Nacionales aportar soluciones; sin embargo
nunca se había llegado a tal virulencia en las acciones de protesta y reclamos.
Acciones
que no son bien vistas, por algunos residentes mapuche, que así lo hicieron
saber a la prensa.
Dichos
reclamos indígenas hoy, son funcionales a los intereses británicos en la
región, razón por la cual reflotaron las alocadas y destempladas apetencias de
un abogado francés, Orellie Antoine de Tounens
que en 1860 convenció a algunos mapuche de crear el Reino de Araucanía y Patagonia
con él como Rey litigaría y llevaría sus reclamos al concierto internacional.
Cuestión
que nunca ocurrió formalmente pero le sirvió a este personaje lograr ingresar
al complejo mundo nobiliario europeo, tan esquivo como anhelado por la burguesía
francesa del siglo XIX.
Reflotar
estas circunstancias, curiosas, llamativas necesariamente deben concatenarce
con la creación en el puerto de Bristol en 1978 una organización compuesta por
miembros mayoritariamente ingleses y un mapuche que se dedicaría
fundamentalmente a recaudar fondos para continuar la lucha del pueblo mapuche.
De esta
organización surge Facundo Jones Huala como vocero mediático de las acciones
que se emprenderían; lejos de ser un terrorista es un funcional activista a los
intereses ingleses y chilenos en la región.
Usted se
preguntará como puede ser funcional a los intereses chilenos e ingleses, y a su
vez a los intereses mapuche.
Muy
simple, llevando el conflicto sobre la tierra al Este de la cordillera.
Chile no
reconoce la Preexistencia de los pueblos aborígenes en su territorio.
Por ésta
simple razón, el “Derecho Ancestral” válido y esgrimido por los pueblos originarios
no puede llegar a tener validez en ese país pero sí en el nuestro que les
reconoce, a los aborígenes, de su territorio, su preexistencia.
Es por
esta circunstancia que Argentina debe asegurar fehaciente-mente la preexistencia
de sus grupos aborígenes y no puede aceptar a todos aquellos que se digan
aborígenes Argentinos preexistentes; o que presionen para ser reconocidos como
tales.
sábado, 30 de septiembre de 2017
Resistencia
Zulma Sanagachi, de la comunidad qom Potae Napocna Navogoh, sigue buscando a su hijo Marcelino Olaire. Cheli, como le dicen los amigos y familiares, desapareció en noviembre del 2016 del Hospital Eva Perón de Formosa. Lo dejó internado por un problema de salud y a la fecha no sabe que paso con él. Por favor, DIFUNDIR!
En estos tiempos mediáticos
que se ha viralizado la aparición del joven Santiago Maldonado, siento una gran
desazón al comprobar lo moldeable que
somos los seres humanos.
En nuestro
país desaparecen jóvenes de ambos sexos, desde que yo tengo memoria, en
particular en la región del NOA o Mesopotamia, en manos gubernamentales, de las
fuerzas de “Seguridad” o de civiles; pero como son de condición humilde o
pertenecen a grupos aborígenes no trascienden y la sociedad los ignoran.
jueves, 14 de septiembre de 2017
Agua… Más AGUA
La desidia y la estupidez, a la orden
del día.
Agua… Más AGUA
La cuenca del salado, es
una vasta región de la Pampa Húmeda, de la provincia de Buenos Aires que
estacionalmente se ve afectada por las intensas lluvias o prologados períodos
de sequía; que suelen afectarla.
Contrariamente a lo que se creería los pobladores de esa rica
zona se hallan indefensos ante dichas manifestaciones climáticas que se abaten sobre la provincia desde
siempre.
El subsuelo parcialmente arcilloso poco permeable no permite escurrir las
aguas de las precipitaciones lo que
históricamente motivó estudios de los especialistas quienes brindaron extensos
informes sobre las obras requeridas para solucionar dicho problema, recurrente.
Las autoridades políticas de todos los signos, que han gobernado en la
Provincia, poco y nada han realizado de
esos planes, consejos o proyectos hídricos que, bien hechos, hubieran
solucionado el problema hoy sigue
afectando la provincia.
De allí la bajada de esta nota, ya que es esa estupidez, esa desidia de
los gobernantes, quienes deberían haber encarado la solución, nunca lo
hicieron.
La provincia fue, desde la concreción Republicana de nuestra
independencia y mucho antes, el centro de la actividad política.
Posteriormente continuó siendo una plataforma
para quienes pretenden acceder a la primera magistratura del país; esta visión
de plataforma proselitista del territorio es el alto costo que debemos pagar
quienes vivimos en él.
Como corolario nuestro costo se potenció con la presencia de esta
generación de mediocres de la política vernácula que jugaron en segunda línea,
durante administraciones mediocres, corruptas, de las cuales surgieron con la
capacidad de poder ofrecer sus servicios de testaferros a los verdaderos
poderes corporativos que manejan los hilos en la región.
El resultado está a la vista aún cuando nada escucharás o verás en los
medios centrales de información; preocupados con el paso por el Caribe, camino
a la península de La Florida y Miami, Estados Unidos del huracán “Irma” y otros
fenómenos que suelen azotar esa región, mientras
ignoran y ocultan lo que ocurre en casa.
viernes, 8 de septiembre de 2017
¡Dicen que dicen!
Amañar la verdad
Este
es un mal social que, lamentablemente los medios modernos de comunicación de
masas a generalizado y potenciado, haciendo que ese concepto de tergiversar,
repetir e inventar conceptos, pase a ser una verdad; verdad funcional a ciertos
intereses, que la utilizan para desinforma y formar a su antojo. esto es lo que
está sucediendo con ciertos temas sensibles.
Usted se preguntará
¿Porqué? Es muy sencillo y usted mismo puede comprobarlo, si se toma su tiempo
para leer, pensar y entender.
Algunos
estudiosos o interesados genuinos de la causa indígena no dicen, ni jamás
diríamos: “… Los Mapuche no son un pueblo
Preexistente”.
Que
significa serlo y reconocerlos como tal; que se hallaban en nuestro territorio
cuando llegaron nuestros antepasados y que hoy les reconocemos ese “Derecho
Ancestral” a quienes estaban en este territorio.
Las
ciencias sociales, no son ciencias exactas, como la física o la matemáticas; la
historia, la antropología y sus especialidades conexas no lo son por hallarse
influenciadas o contaminadas por las propias acciones humanas que son el objeto
de sus estudios; utilizan para llegar a obtener y legitimar ciertos hallazgos o
conclusiones, otras disciplinas que le aporten datos más precisos, como la
Biología, la Genética, la Física, entre otras.
De lo
Expuesto se deduce que los mapuche, o como se llamaran a sí mismos entonces, esos
grupos humanos nómades, (en periodo de transición) hacia el sedentarismo,
venían bajando por territorio Sudamericano, desde la hoya Amazónica.
Todo
esto está detallado y señalado en:

El tema
es tan así, que para que pudieran ser reconocidos como tales representantes de
distintas comunidades y grupos, afincados en Argentina y trasandinos se reúnen
en San Martín de los Andes en 1961, y deciden definitivamente adoptar el nombre
por el cual se los identificaba; como el nombre propio, Mapuche.
Todos
estos estudios fueron realizados por Investigadores, Antropólogos,
historiadores; Argentinos y Chilenos (Menguín, Guevara) y otros, más nuestras
propias investigaciones y de colegas y amigos, conclusiones, que permitieron
llegar a las propuestas que expongo en mis notas y libros sobre la cuestión.
El
reciente descubrimiento y exhumación de los restos funerarios de una doncella,
joven de de ese grupo, de hace 900 años reafirma la presencia de estos en el
territorio en ese tiempo; el enterratorio nos dice que murió y fue enterrada
allí, sólo eso, lo que podamos suponer sobre la situación, son eso
“Especulaciones”.
Si esta
joven fue integrante de esos grupos del período de transición que se
desplazaban hacia el Oeste cuando la encontró la muerte, o pertenecía a un
grupo ya afincado en la región donde les fue común la convivencia, en tránsito
permanente, como se explica en el texto de “La Causa Mapuche”.
F.
Escalada habló del “Complejo Choneca-Tehuelche” en el cual suponía integrado
los Gunena-kune, al norte Patagónico; los Aoni-Kenk, al sur y en la región de
los lagos fueguinos incluía a los,
Selk-nam u Onas; Cuestión que en su momento pensé que requería de la
nueva técnica aportada por los estudios del genoma y el ADN mitocondrial, para
certificar esta última aseveración.
Ellos
ocupaban ese territorio e indudablemente tenían una relación de parentesco con
grupos trasandinos, como lo afirmo en el libro.
Si nos
detenemos aquí un instante a reflexionar, debemos hacerlo por el camino del
presente, con la perspectiva actual, teniendo sí las enseñanzas de los procesos
históricos.; en ese contexto debemos concluir y aceptar que nuestra convivencia
y socialización individual y colectiva se halla regida por la construcción
Republicana.
Esta
figura jurídica que se ha desarrollado en la región mediante los procesos
históricos independentistas y geopolíticos.
En ese
contexto todos los seres humanos que vivimos en un territorio que ostenta su
delimitación geográfica y política,
Fronteras, aceptamos su Nacionalidad y nos encuadramos dentro de sus leyes y
régimen Legal.
El “Derecho
Ancestral” de referencia permite a los Estados Nación ignorar a sabiendas,
estas leyes y aún así respetar el derecho.
Justamente,
por ser una herramienta jurídica tan contundente y taxativa, debe ser acotada o
limitada en su aplicación, definiendo específicamente a los beneficiarios de
dicha normativa.
El derecho
ancestral deberá proteger o amparar a quienes con anterioridad a la
formación del Estado Nación se hallaran asentados en ese territorio y
adquirieran automáticamente, o a su solicitud, esa nacionalidad.
De lo
expuesto, se desprende la pertenencia territorial de vieja data.
Si como
ocurrió en el Cono Sur, los grupos que habitaron el territorio se desplazaban a
su antojo de uno y otro lado del cordón montañoso, como lo demuestran múltiples
registros documentales, que nos hablan a su vez que estos grupos tenían un
territorio propio en uno u otro bando, como lo explico detenidamente en “La
Cuestión Mapuche”
De lo
expuesto inferimos que Había, en estas tierras, pobladores afincados
permanentemente y quienes lo hacían esporádicamente en función de sus
relaciones nucleares, políticas o culturales.
Con la
finalidad de poder discernir con ecuanimidad e impartir justicia, la normativa
establece que, el derecho de Preexistencia, conocido por “Derecho Ancestral”
deberá ser demostrado, aclarado, tipificado y debidamente sustanciado en tiempo
y espacio, con la finalidad de evitar ulteriores “Interpretaciones”.
De hecho,
ese sentido de salvaguardar el derecho individual y colectivo de los habitantes
del territorio Nacional, tiene la expresión Constitucional contenida en primer
párrafo del inciso 17 del Artículo 75 de la actual Constitución Nacional.
Artículo
que impulsamos desde ambas cámaras y Eulogio Frites llevó personalmente a
Paraná donde se reunían los constitucionalistas, para impulsar la modificación
del viejo y obsoleto Art.67 y sus respectivos Incisos.
Letra
que no se ajustaba a la realidad en las relaciones de las últimas décadas, del
siglo XX, esa realidad, que los Argentinos estábamos reconstruyendo durante los
años ochenta, exigía una mayor apertura, comprensión y disposición humanista;
sentimientos que deberían estar expresados en el tratamiento de estas
relaciones, en nuestra Carta Magna.
Comprenderá
el lector que las normas específicas tratan de evitar que hoy quiera hacerse
valer el Derecho Ancestral por el sólo hecho de ser: “Originario de un
lugar o paraje” que es lo que significa ser indígena.
De lo expuesto se desprende también,
como se dará cuenta, que llamarlos originarios no es lo correcto ya que todos
somos originarios, pero NO todos somos indígenas o aborígenes.
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